Cada fragmento tiene una historia.
Fragmentos del Tiempo
Esta colección nace de piezas rotas que el tiempo dejó atrás. Fragmentos de cerámica antigua —rescatados de lo olvidado- son pulidos a mano y engastados en plata, para darles una nueva vida como joyas. Cada uno conserva huellas de historia, formas que fueron parte de platos, tazas, memorias.
Fragmentos del Tiempo es un homenaje a lo que fue y sigue siendo. Porque lo bello también puede nacer de lo que se rompe.
Fragmentos del Tiempo
Cada fragmento tiene una historia.
El vidrio marino nace del encuentro entre lo humano y la naturaleza. Alguna vez fue parte de una botella, una ventana, quizás un objeto olvidado que el mar decidió transformar. Durante años, fue mecido por las olas, golpeado por rocas, suavizado por el tiempo. Lo que empezó como desecho, hoy regresa convertido en tesoro.
Crear joyas con vidrio marino es honrar ese viaje. Es transformar lo roto en algo bello. Es un acto de paciencia, respeto y segunda oportunidad. Cada pieza es única, irrepetible, como una huella del océano que el tiempo quiso guardar.
Llevar una joya hecha con vidrio marino es llevar contigo un pedacito de mar y su memoria infinita.
Una historia de resiliencia, cambio y belleza natural.
